A los que estudiamos
latín nos preguntan de vez en cuando: “y en latín cómo se dice
....” Por ejemplo, ahora que se acercan las fiestas de Navidad y
Año Nuevo, algunos preguntan cómo sonaría el popular saludo en
latín.
Ya que creo que “mejor
que dar un pescado, es dar una caña de pescar”; por lo tanto en lugar de
simplemente poner un par de fórmulas para este caso, quisiera
subrayar algunos puntos que el estudiante tiene que tener en cuenta
para traducir cualquier frase del castellano al latín.
Imagen de la Koninklijke Bibliotheek (National Library of the Netherlands) |
1.- Recordad las
declinaciones (en especial el vocativo): aunque las declinaciones
están entre las primeras cosas que aprende el estudiante, sin
embargo fácilmente se olvidan a la hora de traducir, y usamos los
sustantivos latinos como los castellanos que la única mutación que
conocen es entre singular y plural: el rey - los reyes; y en los
adjetivos se añade además la posibilidad de masculino y femenino:
blanco, blanca; blancos - blancas.
Felizmente el
nominativo y el vocativo en latín coinciden en la 1º, 3ª, 4ª y 5ª
declinación, pero debemos estar atentos cuando pisamos el terreno de
la 2ª declinación. Por ejemplo la invocación. “¡Señor, sálvame!” se debe traducir con un “Domine!”, y no con un
“Dominus!", ya que en esta declinación debemos distinguir ese matiz.
El vocativo no es una simple aposición, (pues sino se disolvería en el nominativo) sino que aporta un matiz
que se debe conservar. Y pensemos que en los saludos,
felicitaciones, etc, está presente la apelación al destinatario, unida por lo general a un matiz de admiración, de
exclamación, que en castellano solo puede expresarse con los signos
¡!
El vocativo, al apelar directamente al interlocutor, transmite un
matiz, una fuerza y un color especial: “Care fili!” = “¡Querido
hijo!”
2.- Distinguir entre un
nominativo y un vocativo no es otra cosa que aplicar el análisis
gramatical, el cual debe tenerse en todo momento. Por ejemplo, si
quiero decir: “Te deseo una larga vida”, debemos analizar: yo
deseo una larga vida a ti (S + V + OD + OI).
Por lo tanto,
traducimos: “(ego) exopto tibi longam vitam”. (Nom + V + dat +
acus). Y si añadimos un vocativo:
"Care amice, exopto tibi longam vitam" = "Querido amigo, te deseo una larga vida".
"Care amice, exopto tibi longam vitam" = "Querido amigo, te deseo una larga vida".
Recuerda que en latín
el orden puede variar con mucha libertad: “Longam vitam, care amice, tibi
exopto”.
3.- En castellano
usamos con frecuencia diversos tipos de oraciones subordinadas que
requieren un nivel avanzado de latín. ¿Solución? Simplificarlas:
“Anhelo que llegues
pronto” = “exopto proximum adventum tuum”.
“Espero que logres lo
mejor” = “exopto tibi omnia optima”.
4.- Mirad a fondo en el
diccionario el significado de las palabras que vais a usar. No
hay que dejarnos llevar fácilmente por la similitud de escritura. Por
ejemplo, nosotros solemos usar la palabra “feliz” en el sentido
de plenitud o satisfacción física y sicológica. Esta idea en latín
más encaja con “beatus” que con “felix”, pues aplicado a las
personas, “felix” tiene más la idea de afortunado, persona con
buena suerte, que le va bien, destacado en su materia.
Por lo tanto para
expresar ese bienestar diremos:
“Quiero que seas
feliz” = “Volo te beatum esse”; o si es a una mujer: “Volo te
beatam esse”.
Si quiero augurar buena
fortuna:
“Deseo que seas
afortunado/ tengas buena suerte/ que te vaya bien” = “Opto te
felicem fore”.
Muchas veces “feliz”
en castellano lleva la idea de alegría, en ese caso tenemos en latín
los adjetivos “laetus, -a, -um” y “gaudens, -tis”. Por
ejemplo:
“Te deseo un feliz
cumpleaños” = “Exopto tibi laetum natalem diem”.
“¡Feliz cumpleaños!
= “[Exopto tibi] Gaudentem natalem diem!” = “[Exopto tibi] Laetum natalem diem!”
5. En el caso de los
verbos la atención debe ser máxima, no solo por el significado,
sino también por la construcción: no todos admiten objeto directo
(acusativo) sino que exigen “ut” + subjuntivo, u oraciones
infinitivas. Veamos algunos verbos que nos pueden ser útiles para construir saludos:
“Spero amorem nostrum
omnia victurum esse” = “Creo que nuestro amor vencerá todo”.
“Spero amicitiam
nostram sempiternam fore” = “Tengo la esperanza que nuestra
amistad será eterna”.
“Cupio vinum bibere”
= “Deseo beber vino”. El verbo “cupio” indica la inclinación
natural, la involuntaria, una pasión o un deseo vicioso.
“Volo te ducere
uxorem” = “Quiero casarme contigo”. El verbo “volo” indica
la firme expresión de la voluntad racional. En subjuntivo presente
(velim) indica un deseo realizable. Con el subjuntivo imperfecto
(vellem) se indica un deseo irrealizable.
“Opto vivere tecum”
= “Quiero vivir contigo”. El verbo “opto” expresa una libre
elección o un deseo deliberado. El verbo “exopto” subraya la
fuerza de ese deseo.
Si sientes que no
dominas a fondo las diversas reglas de estas construcciones, es mejor
buscar una forma simplificada de expresar lo mismo.
6. ¿Y nuestro saludo
de Navidad y Año Nuevo? Podemos usar algunas de estas fórmulas:
“Laeta Christi
nativitas!” = “¡Oh feliz Navidad!”
"Laeta Christi nativitas, quae corda fidelium suavi pace imples, ignem fidei accende" = "Oh feliz Navidad, que llenas de dulce paz los corazones de los fieles, enciende el fuego de la fe".
"Laeta Christi nativitas, quae corda fidelium suavi pace imples, ignem fidei accende" = "Oh feliz Navidad, que llenas de dulce paz los corazones de los fieles, enciende el fuego de la fe".
“Exopto tibi (vobis)
gaudentem Domini nativitatem” = “Te (os) deseo una feliz Navidad”.
“Fauste Anne Nove!”
= “¡Oh feliz Año Nuevo!”
“Antonio et Pilar,
exoptamus vobis faustum annum novum MMXVI” = “Antonio y
Pilar, os deseamos un próspero año nuevo 2016”. Los nombres
puedes dejarlos en castellano.
“Exopto proximum
annum tibi faustum fore” = “Anhelo que el próximo año te vaya
todo bien”.
“Oro Dominum ut
valeas proximo anno MMXVI” = “Rezo al Señor para que goces de
buena salud durante el nuevo año 2016”.
“Haec Christi
nativitatis salutatio pacis et laetitiae nuntius sit” = “Que este saludo de Navidad sea mensajero de paz y alegría”.
Ahora crea tus propias
combinaciones. Recuerda que “nativitas” no significa “Navidad”,
sino simplemente “nacimiento”, por lo cual es conveniente
especificar “Domini” o “Christi”. Año 2016 es "annus bis millesimus sextus decimus" que se debe declinar según su posición en la oración.
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EXOPTANT OMNIBUS LECTORIBUS
GAUDENTEM CHRISTI
NATIVITATIS DIEM
ET
FAUSTUM ANNUM NOVUM
MMXVI
Gracias,Exopto tibia gaudetem Domini nativitatem. Me fue muy útil
ResponderEliminarMaravilloso. Me ha servido de muchísima ayuda, latinista blogero :-)
ResponderEliminarPara la investigación histórica en muchas fuentes medievales es obligado el latín.
Gracias.